Vacía
Ignacio Zuloaga. Paisaje de Alhama, 1923
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
Ignacio Zuloaga. Paisaje de Alhama, 1923
Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
“No es que reconozcamos ese paisaje, es que somos él. Somos esa España vacía, estamos hechos de sus trozos. Es la única forma plausible de patriotismo que queda para un español”
La España vacía, Sergio del Molino
Despoblación y silencio donde en algún momento hubo vida rebosante. A medida que pasa el tiempo, buena parte del entorno rural se asfixia al ritmo de la creciente querencia de sus habitantes por el ámbito urbano. Los datos auguran la desaparición de los pueblos más pequeños y alejados de las principales ciudades.
Hoy se habla mucho de esta España vacía pero no es un fenómeno nuevo: ya la retrató hace un siglo el pintor Ignacio Zuloaga que no dejó nunca de recorrer toda la península dispuesto a pintar cada región por remota y abandonada que fuera.
Nació en Eibar, y salió de allí cuando pudo. Se formó en Madrid donde se encontró con los maestros. Después, en Roma, continuó su formación hasta llegar a París, donde se topó con algunos postimpresionistas como Gauguin o Toulouse-Lautrec.
De vuelta a España, recorrió cada región pintando espacios vacíos, yermos y pobres. Encontró algo interesante en lo que hoy no parece interesar a nadie: el paisaje urbano de estos pueblos, los campos desolados, las viejas casas agrietadas, la arquitectura popular o los nobles blasones de piedra casi borrados que son testigos del paso del tiempo y de la historia.
La pintura de Zuloaga nos hace imaginar ese paisaje en silencio, como si estuviera de luto. Pero si uno presta atención empiezan a brotar palabras desconocidas, sonidos y ritmos centenarios que habitan estos lugares. La familia Mayalde ha puesto música a esta otra España y ha puesto en valor cosas que se nos habían olvidado.
Escucha aquí la banda sonora de este territorio vaciado mientras descubres si una parte de ti está entre las pinceladas de Zuloaga.